TERREMOTO

Tan solo unos pasos
me separan de ti,
pero siento como una chispa
va cobrando vida dentro de mí.

Mientras te acercas
te voy besando con mi mirada.
Tengo hambre de tu olor
y de tu cuerpo.

Nos miramos profundamente,
en un pestañeo te cuento
cuanto te he extrañado.
Y te beso... y me besas.

Y un cosquilleo se hace presente
en mi espalda y en mis caderas.
Dejo que tus manos
exploren mi cintura.

Extrañaba el susurro
de tus uñas en mi piel.
Tu boca se detiene
en mi hombro izquierdo.
Lo acaricias con tus labios,
mientras me aferro a tu pelo.

Mis muslos tiemblan
ante la llegada de tu boca,
es inevitable el encuentro
de tu lengua con mis labios.

Y te siento...
Y te deseo cada vez más...
Las marcas de tu fuego
quedan impresas en mi vientre,
un terremoto de sensaciones extremas
se pasea por mi cuerpo.

Y tiemblo... de felicidad,
de tanto placer soñado.
Mi alma se llena de luz,
una energía sin nombre
invade cada partícula de mi ser.

Y te amo.
Amo tu sudor cayendo en mi frente,
amo tu cintura danzando sobre mis caderas.
Pero por sobre todo
te amo a ti,
más que a nada en este mundo.